El eurodiputado, Antonio Masip
Hidalgo y su colaborador Pablo Sánchez la Chica publicaron recientemente su
libro “Europeos pero Incorrectos”.
En él, los autores expresan su
opinión sobre el funcionar de la Unión Europea en diferentes áreas de trabajo
partiendo desde su propia experiencia tras más de 10 años. Una de estas áreas
es el papel de la UE en el mundo, enfocando un capitulo a la relación con el
Magreb y principalmente en relación con el tema del Sahara Occidental.
Con respecto hacia el norte de
África los autores expresan que la UE debe buscar nuevos interlocutores con los
cuales crear estabilidad en la región del Mediterráneo, garantizando en la
región los derechos humanos en los acuerdos comerciales con terceros; el
pluralismo político y la dignidad humana.
Con respecto al Sahara
Occidental, Masip y Sánchez hacen alusión a la pasión que tienen por el tema
desde hace ya muchos años. Los autores hacen referencia a las acciones
emprendidas para apoyar la causa Saharaui frente a la UE, pero sobretodo frente
al Parlamento Europeo. También relatan la travesía que se llevo a cabo para
apoyar a la defensora de derechos humanos, Aminatou Haidar y las trabas puestas
por Marruecos. Así mismo, hacen referencia al temor europeo de “molestar a
(los) amigos marroquíes” y cómo esto ha obstaculizado en gran parte el éxito de
sus esfuerzos. Por otra parte se hace referencia a la Primavera Árabe la cual
confirman los autores haber comenzado en el Sahara Occidental con el
desmantelamiento de Gdeim Izik.
Los autores también mencionan
la restricción que se vive en Marruecos con respecto al conflicto con el Sahara
Occidental, y la importancia que esto, junto con las estrechas relaciones
económicas, tienen sobre la UE. Masip y Sánchez recomiendan a la UE no
continuar fiándose de falsas democracias y poner atención a los “desmanes del
rey marroquí”.
Finalmente, los autores
concluyen haciendo referencia a los acuerdos comerciales y de pesca entre la UE
y Marruecos, sin olvidar mencionar la ilegalidad de estos acuerdos y las
consecuencias perjudiciales no sólo para la población Saharaui pero también
para los españoles, y brindando beneficios única y exclusivamente al rey
marroquí.