jueves, 16 de agosto de 2012

ONGs asturianas critican la evacuación de los cooperantes españoles del Sahara


La medida del gobierno español, de repatriar a los cooperantes, ya ha tenido un niño muerto, en esos dias de ausencia forzada, por no tener acceso a las atenciones anteriores.
Se compareció ante los medios la Presidenta de la Coordinadora Asturiana de ONGd, Mercedes Glez, el Vicepresidente de la Asociación de Amistad con el Pueblo Saharaui, Alberto Suarez, y el Presidente del Observatorio Asturiano de ddhh en el Sahara, Javier Glez Vega, quien acababa de llegar del Sahara, para contar el rechazo unánime a la medida del ministro español, precipitada y poco explicitada, el intento de restar apoyos a la población saharaui, y que los objetivos de la misión se han cumplido a cabalidad, llamando a la atención pública a poner los ojos en la situación de indefensión de los pobladores del desierto, que echa de menos la cooperación española.
La medida del gobierno español, de repatriar a los cooperantes, ya ha tenido un niño muerto, al decir de MdM, en esos dias de ausencia forzada, por no tener acceso a las atenciones anteriores.
No han sentido ni una sola migaja de inseguridad y han escuchado a las Autoridades de la República Árabe Saharaui Democrática su disposición a colaborar en caso necesario con el gobierno español, lo mismo que hicieron con el gobierno vasco, aceptando incluso modalidad de seguridad foráneas.
Ninguna excusa, pues, para el gobierno español, que se ha visto desmentido asimismo por la MINURSO de la ONU.
Se conviene en que la medida del ministro era nada inocente, y que obedecía, presumiblemente, al intento de desalentar la fuerte solidaridad ciudadana con el Sahara: los servicios secretos españoles fueron ¿tal vez? intoxicados por los policías marroquíes.
A los campamentos viajan entre 3 y 5mil personas al año, en una convivencia ciudadana en la que los cooperantes son una minoría.
Según la legalidad internacional España es todavía la responsable de la descolonización del Sahara, 37 años después de la traición de Franco.
El Movimiento de Solidaridad ha sabido estar, otra vez, a la altura, por encima de los gobiernos, y persistirá en su compromiso con el pueblo saharaui para no dejarles rendirse por hambre.
La delegación estuvo acompañada de numerosos medios de comunicación, también por la televisión autonómica de Asturias.
Resolución de la Coordinadora Asturiana de ONGD sobre la situación en el Sahara
Oviedo, 7 de agosto de 2012.- Tras la reunión mantenida en el día de ayer con las organizaciones asturianas que trabajan en los Campamentos de Refugiados Saharauis en Tindouf y el Delegado del Frente Polisario en Asturias, Abdu Mohamed Fadel, la Coordinadora Asturiana de ONGD en el ejercicio del compromiso que mantiene con la causa del pueblo saharaui, hace publica la siguiente resolución:
Las ONGD desarrollan su labor habitualmente en situaciones de conflicto en los países en los que trabajan. En los últimos años se han incrementado los esfuerzos en el desarrollo de diferentes mecanismos e instrumentos, consensuados y compartidos con sus copartes, autoridades locales, AECID y Agencias de Naciones Unidas (NN.UU.), para garantizar la seguridad del personal desplazado al terreno, constituyendo una prioridad absoluta en la ejecución de sus proyectos.
La decisión de evacuar al personal de las ONGD desde Tindouf el 28 de julio pasado, adoptada por el Ministerio de Asuntos Exteriores, contrasta con el incremento y mejora en las medidas de seguridad a raíz del secuestro ocurrido en el mes de octubre, articuladas por el Gobierno de la RASD y el Gobierno de la Republica de Argelia así como las medidas adoptadas por las organizaciones en el terreno. Tales medidas de las que el Ministerio y la AECID tienen constancia, proporcionan un marco de actuación que garantiza la continuidad de los proyectos de cooperación así como de otras acciones solidarias como han sido la reciente celebración del SaharaMarathon y el Festival de Cine del Sahara, transcurridos sin ningún tipo de incidente en un clima de completa normalidad.
El conflicto en el Sahara Occidental está estancado desde 1991, a la espera de un referéndum de autodeterminación que debido a la intransigencia del Reino de Marruecos y la pasividad de Naciones Unidas, no termina de celebrarse.
Señalamos especialmente la responsabilidad de España, que tal como lleva sucediendo los últimos 37 años, sigue sin dar pasos en la resolución del conflicto, obviando su responsabilidad como potencia administradora del territorio (tal y como se recoge en la resolución 2072, de 17 de diciembre de 1965 de la Asamblea General de la ONU y posteriormente en otras [1]), lo que condena a la población saharaui al refugio en los Campamentos de Tindouf. Cientos de miles de personas se encuentran en una situación de absoluta necesidad de atención y asistencia por parte de las agencias internacionales de Ayuda Humanitaria y Cooperación al Desarrollo. Como consecuencia de los recortes presupuestarios, los envíos de alimentos y medicinas no llegan a cubrir las necesidades de la población.
La Coordinadora Asturiana de ONGD exige una vez mas al Gobierno español que se haga eco del sentir de la sociedad española articulada en torno a las cientos de asociaciones de solidaridad, ONGD y Ayuntamientos, que a través de iniciativas y proyectos de cooperación, acciones de sensibilización y denuncia, día a día, expresan públicamente su apoyo al Pueblo Saharaui, ejerciendo un papel activo y firme en la exigencia de la convocatoria y celebración de un referéndum libre, transparente, verificable e imparcial que contemple la opción de la independencia del Sahara Occidental.
[1] Esta cualidad de España como "potencia administradora" del Sahara Occidental fue expresamente reiterada por varias resoluciones posteriores de la Asamblea General: resoluciones 2229 (de 20 de diciembre de 1966), 2354 (de 19 de diciembre de1967), 2428 (de 27 de diciembre de 1968), 2591 (de 16 de diciembre de 1969), 2711 (de 14 de diciembre de 1970), 2983 (de 14 de diciembre de 1972) y 3162 (de14 de diciembre de 1973). Desde entonces la única calificación de la presencia de Marruecos que se contiene en las resoluciones de las Naciones Unidas es la de potencia ocupante siendo España, aún, la potencia administradora del territorio, si no de facto, sí de iure.