domingo, 16 de septiembre de 2012

HRW dice que no hay evolución significativa de derechos humanos en Marruecos


Marruecos reaccionó a las reivindicaciones populares de 2011 en el marco de la "primavera árabe", pero no existe una evolución significativa en materia de derechos humanos, dijo hoy en Rabat el director de investigación de Human Rights Watch (HRW) en el Norte de África, Eric Goldstein.
"Marruecos reaccionó muy rápido al permitir manifestarse, en cierta medida, al movimiento contestatario 20 de febrero y con una nueva constitución muy interesante, pero no hay una evolución significativa en materia de derechos humanos", explicó Goldstein a Efe.
El investigador de HRW, cuya visita de trabajo a Marruecos coincide con la del relator especial de la ONU sobre la tortura y los malos tratos, Juan Méndez, afirmó que a veces los manifestantes protestan sin problemas, pero en otras son dispersados "a través de una violencia ciega, con arrestos, procesos y dudosas acusaciones".
La "primavera árabe" llegó el año pasado a Marruecos con manifestaciones populares en demanda de mayor democracia y justicia social, pero, salvo casos contados de brutalidad policial, el movimiento fue básicamente pacífico.
Según Goldstein, Marruecos se beneficia de una visión positiva por parte de Occidente por haber sabido reaccionar a las reivindicaciones populares, pero está por ver si estas reformas se sostendrán a largo plazo y responderán a las aspiraciones del pueblo.
La nueva Constitución aprobada en referéndum el 1 de julio de 2011 y unas elecciones anticipadas en las que ganó por primera vez en la historia un partido islamista, permitió a Marruecos mitigar la oleada de contestación que sacudió a todo el mundo árabe.
Respecto a los saharauis que llevan detenidos sin juicio desde hace casi dos años, tras los enfrentamientos que siguieron al desmantelamiento en 2010 del campamento de Gdeim Izik, en las afueras de El Aaiún (capital del Sáhara Occidental), Goldstein consideró un "abuso" que el proceso (previsto para el próximo 24 de octubre) no se haya todavía celebrado.
Al menos 22 saharauis fueron detenidos la mayoría en noviembre de 2010, en los días posteriores al desmantelamiento del campamento de Gdaim Izik, en el conflicto más grave registrado en el Sáhara Occidental en los últimos 20 años, que se saldó con la muerte de 13 personas, 11 de ellas policías marroquíes.
"Considero abusivo que está gente haya pasado dos años en prisión sin que el proceso comience (...) es irracional", apuntó Goldstein, quien destacó que la ley marroquí obliga a que la celebración de un juicio no supere los 12 meses.